En el mundo del fitness, el debate sobre la longitud del rango de movimiento durante el entrenamiento de resistencia continúa ganando atención, especialmente en relación con el crecimiento muscular. Recientemente, un enfoque innovador ha cobrado popularidad: las repeticiones parciales en su máxima longitud de estiramiento. Estas técnicas han mostrado resultados prometedores en estudios recientes, lo que ha llevado a muchos atletas y entrenadores a reconsiderar sus rutinas de ejercicio, buscando maximizar el desarrollo muscular. La investigación sugiere que estas repeticiones parciales podrían ofrecer beneficios significativos en comparación con los entrenamientos convencionales.
Un estudio destacado dirigido por Larsen et al. (2025) analizó los efectos del entrenamiento de gemelos a través de elevaciones de talones completas en comparación con repeticiones alargadas tras alcanzar el fallo muscular. Los resultados fueron concluyentes: se observó un incremento del 9,6% en el grosor muscular entre los participantes que realizaran repeticiones parciales en posición alargada, superando el aumento del 6,7% logrado por aquellos que completaron rangos de movimiento normales. Esta diferencia sustancial refuerza la idea de que el tiempo bajo tensión en posiciones óptimas puede ser crucial para fomentar la hipertrofia muscular.
La investigación en mujeres jóvenes reveló hallazgos igualmente significativos. Kassiano et al. (2023) llevaron a cabo un estudio en el cual se entrenó exclusivamente en el rango de movimiento de longitud muscular alargada. Los resultados mostraron aumentos notables en las áreas del gastrocnemio medial y lateral, lo que pone de manifiesto cómo un enfoque especializado en el rango estirado no solo es efectivo, sino que supera las estrategias de rango de movimiento más cortas o completas, particularmente entre quienes no tienen experiencia previa en entrenamiento.
Adicionalmente, la investigación de Pedrosa et al. (2022) también subrayó mejoras significativas en la hipertrofia del cuádriceps al realizar entrenamientos parciales en posiciones alargadas. Los resultados indicaron que este tipo de entrenamiento no solo es eficaz, sino que también resalta la importancia de focalizar la tensión mecánica específicamente en posiciones más estiradas, contribuyendo de manera notable al crecimiento muscular en áreas específicas. Este enfoque destaca las posibilidades de personalizar el entrenamiento y adaptar las rutinas para optimizar los resultados.
Por último, el estudio de Wolf et al. (2025) demostró que los individuos entrenados lograron adaptaciones musculares similares al realizar tanto rangos de movimiento completos como parciales alargados. Este hallazgo sugiere que, independientemente del nivel de experiencia de los entrenadores, las repeticiones parciales en posiciones alargadas pueden ser tan efectivas como el entrenamiento tradicional. Dada la creciente evidencia de los beneficios de este método, se recomienda incorporar estas repeticiones en las rutinas de ejercicio, especialmente una vez alcanzado el fallo muscular, para potenciar al máximo cada serie y fomentar un desarrollo muscular óptimo.