El Gobierno de Chile ha alcanzado un acuerdo significativo con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) para aumentar el salario mínimo a $529.000 a partir del 1 de mayo de 2025. Esta decisión fue anunciada el pasado martes en el Ministerio de Hacienda, y se contó con la presencia de los ministros del Trabajo, Giorgio Boccardo, y de Hacienda, Mario Marcel, además del presidente de la CUT, David Acuña. Este acuerdo no solo establece una inmediata mejora salarial, sino que también incluye un segundo ajuste programado para enero de 2026, cuando se prevé que el salario mínimo alcance los $539.000. El proyecto de ley que formalizará esta medida será presentado en los próximos días al Congreso Nacional para su discusión y aprobación.
Junto al aumento del ingreso base, el acuerdo incluye varias medidas complementarias que buscan mejorar la calidad de vida de los trabajadores. Entre ellas destaca el fortalecimiento del Observatorio de Ingresos y Condiciones de Vida, que permitirá recopilar y analizar datos sobre la situación laboral del país. El ministro Boccardo enfatizó que el diálogo social ha sido clave en esta negociación y que este acuerdo es parte de una serie de iniciativas laborales impulsadas desde el inicio del gobierno del presidente Gabriel Boric, con el objetivo de mantener y mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores chilenos.
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, también se pronunció sobre el acuerdo, subrayando la importancia de fijar el salario mínimo sobre la barrera de los $500.000 para asegurar que no haya retrocesos en términos reales. Marcel destacó que esta propuesta establece un fundamento sólido para futuras políticas públicas relacionadas con sueldos y condiciones laborales. Asimismo, la creación y mantenimiento de un Observatorio de Ingresos permitirá contar con datos actualizados y relevantes que guíen futuras decisiones en materia social y económica.
David Acuña, presidente de la CUT, reconoció que, aunque el incremento propuesto pueda parecer modesto, representa un avance crucial para muchos trabajadores y trabajadoras. Resaltó que la transición de $500.000 a $539.000 es un paso hacia la dignidad laboral. A su vez, Acuña hizo un llamado a los parlamentarios a apoyar la aprobación del proyecto, enfatizando la necesidad de implementar políticas salariales efectivas que permitan a los ciudadanos vivir con dignidad y no solo sobrevivir en un contexto de costos de vida crecientes.
El acuerdo también establece ajustes para trabajadores en situaciones especiales, como aquellos menores de 18 años o mayores de 65. Los incrementos en el salario mínimo se extienden a beneficios sociales y subsidios familiares, que también verán una actualización en los próximos meses. Entre los detalles, se menciona que el Subsidio Único Familiar y la Asignación Familiar tendrán ajustes significativos que beneficiarán a miles de familias. Además, el Gobierno se compromete a aportar al Fondo de Estabilización de Precios del Petróleo, con el fin de controlar el precio del kerosene y facilitar el acceso a servicios básicos, reflejando un compromiso integral con el bienestar social.