La dirección del Senapred ha anunciado la cancelación de la evacuación por tsunami para el territorio antártico chileno, logrando así tranquilidad en esta área, luego de que se detectara una amenaza que inicialmente generó preocupación. La directora nacional, Alicia Cebrián, comunicó que la amenaza de tsunami ha sido oficialmente cancelada y se ha evaluado que no hay posibilidad de un nuevo evento de este tipo en la región. Sin embargo, la alerta se mantiene vigente para el resto de la región de Magallanes, donde las autoridades instan a la población a permanecer en estado de precaución.
Durante la evaluación realizada por las autoridades, se detectaron incrementos en el nivel del mar en la Base Prat, donde se registró un aumento de 6 centímetros, calificado como un «tsunami instrumental». Asimismo, en la base ucraniana se registró un aumento de 23 centímetros. Cebrián destacó que este fenómeno ya ha ocurrido y que no se esperan más incidentes de este tipo en el territorio antártico chileno. Estas mediciones permitieron a especialistas del SHOA tomar decisiones informadas sobre la seguridad de la zona.
Cebrián también hizo un llamado a la comunidad para que evite acercarse a las playas y al borde costero de la región de Magallanes hasta que la situación sea completamente normalizada. Esta recomendación se da en el contexto de que aún persiste un estado de precaución en la región, y las clases se mantendrán suspendidas mientras dure esta alerta. Las autoridades enfatizan la importancia de seguir las recomendaciones, dado que mantenerse alejados de las zonas costeras es fundamental para garantizar la seguridad de todos.
La activación de las alarmas ante la posibilidad de un tsunami se debe a un terremoto ocurrido en la zona, que ha generado 17 réplicas hasta el momento. Las evaluaciones en tiempo real son críticas en estos momentos para prevenir riesgos mayores. La comunidad científica y los organismos de protección civil han aumentado la vigilancia en el área, asegurando que cualquier cambio en las condiciones se comunique a la población inmediatamente.
En resumen, aunque la situación en el territorio antártico ha mejorado con la cancelación de la evacuación, la región de Magallanes continúa con la alerta activa, lo que implica un monitoreo constante y la necesidad de seguir las instrucciones de las autoridades locales. Cebrián reiteró que la seguridad de la población es la prioridad número uno, y pidió a todos mantener la calma y estar informados a través de los canales oficiales.
