El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, se ha defendido recientemente de la controversia generada por un video que se volvió viral, donde se le ve comprando paltas a un comerciante informal en una feria de Rancagua. Valenzuela afirmó que no tenía conocimiento de que el vendedor en cuestión era un «colero», un término utilizado en Chile para referirse a vendedores no autorizados en espacios públicos. A pesar de la presión mediática, el ministro ha mantenido su postura de que siempre ha preferido hacer sus compras en ferias libres, defendiendo así la economía local.
En una serie de declaraciones, Valenzuela reconoció no haber recibido boleta por su compra, justificando que ni los vendedores formales ni los informales entregan recibos en ese tipo de ferias. Esta afirmación ha suscitado críticas, ya que muchos consideran que los consumidores tienen derecho a solicitar boletas de compra, independientemente de si el vendedor está establecido o no. La falta de boleta ha abierto un debate sobre la regulación y la necesidad de formalizar a los comerciantes para asegurar la protección del consumidor.
El ministro fue cuestionado sobre la legalidad de sus compras y si había algún tipo de protocolo que siguiera al momento de adquirir productos en ferias. En respuesta, Valenzuela argumentó: «¿Me está sugiriendo que yo de certeza 100% que cada vez que compre en la feria tenga que hacer un trabajo de pedir la patente comercial? Seamos serios.» Este comentario ha generado tanto apoyo como críticas, ya que algunos creen que los funcionarios públicos deberían ser más cuidadosos para no fomentar el comercio informal.
A pesar de la controversia, Valenzuela reafirmó su compromiso con las ferias libres, indicando que ha dedicado toda su vida a comprar en estos espacios. Sin embargo, para evitar futuros inconvenientes, el ministro anunció la creación de una mesa de trabajo con el Ministerio de Economía, feriantes y municipios. Este nuevo enfoque busca establecer un sistema donde los vendedores deban exhibir su patente municipal al día, con el objetivo de brindar mayor tranquilidad tanto a consumidores como a comerciantes.
La propuesta del ministro se enmarca en un esfuerzo por regular el comercio en ferias y proteger tanto a los compradores como a los vendedores que operan de manera legal. Con esta iniciativa, Valenzuela espera minimizar los errores en las compras y potenciar el desarrollo de un comercio justo. Mientras tanto, la discusión sobre el rol del Estado en la supervisión de estas ferias y el respeto por la normativa vigente continúa siendo un tema candente en el ámbito público.